Te aseguramos que cualquier encuentro sexual mejorará si utilizas un lubricante pero ¡ojo! solamente si eliges el adecuado. No todos son los mismos ni funcionan de la misma manera; están los de agua, los de aceite, los caseros, los de “efectos secundarios” e incluso los de sabor, los de aroma y más.
Realmente hay una gran variedad de lubricantes en el mercado pero aquí te explicamos cómo funcionan los más populares.
De silicona
El lubricante de silicona dura mucho más tiempo que cualquier otro, ya sea en la recámara, en el baño o en cualquier lugar. Este es el más recomendable para aquellos que quieren tener una sesión apasionante muy larga e incluso bajo el agua.
El producto es grasoso y no lo absorbe la piel pero no es el favorito de mucho porque, según ellos, “no se siente natural”. Aún así es uno de los mejores para el sexo anal y en la regadera.
El único contra de este lubricante es que no todos se llevan bien con el látex y no se puede usar con juguetes sexuales ya que deteriora su superficie y los desgasta de más.
De agua
Los lubricantes de agua se sienten más naturales ya que imitan la lubricación natural. A comparación del de silicona o aceite, el de agua lo absore la piel así que se tiene que utilizar en varias ocasiones durante la relación sexual. Son además completamente seguros para el condón y tampoco dejan manchas.
Usualmente los lubricantes de sabores son de agua así también te ofrecen una gran variedad en el mercado.
Lubricante “cálido”
Este tipo de lubricantes llevan ese nombre porque, al contacto con la piel, generan la sensación de calor. Y ustedes se preguntarán, ¿por qué querría sentir eso durante el sexo? Pues no son tan fuertes como imaginas, realmente dan una sensación sexy y corta que a muchas personas les provoca más placer.
Para crear ese efecto se necesitan la ayuda de químicos pero hay lubricantes más naturales que utilizan canela o menta.
Por ningún motivo utilices este producto para el sexo anal ya que puede crear una experiencia desagradable y, en ocasiones, dolorosa.
Lubricante casero
Hay personas que buscan hacerlo todo ellas mismas pero el lubricante es uno de esos productos que son más seguros si los compras. Pero si de verdad necesitas utilizar uno hecho en casa, lo más saludable es tomar prestado el aceite de oliva aunque seguramente manchará tus sábanas.
Tips
Antes de comprar cualquier lubricante, pruébalo si está permitido. Siéntelo, huélelo y averigua qué sabor tiene. No querrás gastar tu dinero en un producto que al final del día no te va a hacer feliz.
Lee todos los ingredientes antes de comprar algo. Si eres alérgica a algún ingrediente, busca los lubricantes hipoalergénicos. Hoy en día hay productos para todas las personas en el mundo.
Ten en cuenta que muchos condones ya traen espermicida pero los lubricantes no. Por sí solo no previene un embarazo ni el contagio de enfermedades de transmisión sexual.
Fuente: Eme de mujer
0 Comentarios